Estudiante de la UAS Cuestiona el Gasto de $65,000 por Alumno y Denuncia Uso de Alumnos en Marchas Políticas
Culiacán, Sinaloa – La auditoría pública y el manejo financiero de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) fueron puestos en tela de juicio por un estudiante, quien además lanzó una grave denuncia sobre la manipulación de alumnos para fines políticos.
Marcos Urbina, estudiante de la Facultad de Psicología, se dirigió a los asistentes en una reunión informativa de derechos el pasado 19 de noviembre, para exponer diversas problemáticas que afectan la vida universitaria, desde el presupuesto hasta la calidad educativa.
Cuestionamiento al Gasto por Alumno
Urbina inició su crítica financiera al citar una cifra de inversión pública que contrasta con las carencias internas de la Universidad. El estudiante afirmó que “México está pagando $65,000 pesos por alumnos” de la UAS.
Este dato fue utilizado como un punto de partida para cuestionar dónde se dirige ese recurso, dada la evidente falta de mantenimiento y servicios básicos. Urbina señaló que la “carencia como papel de baño en los sanitarios es vergonzoso”, evidenciando que el presupuesto no se está traduciendo en condiciones mínimas y dignas para la comunidad estudiantil.
Exposición y Uso Político de Estudiantes
La denuncia más seria de Marcos Urbina se centró en la presunta instrumentalización de los estudiantes por parte de la administración universitaria.
El alumno hizo énfasis en que “usaron a los alumnos para marchar cuando querían meter a la cárcel al Rector de la UAS, Jesús Madueña Molina”.
Lo más grave de su señalamiento es que esta movilización se realizó “exponiéndolos en la calle por la violencia de los llamados culiacanazos”. Esta declaración implica que los estudiantes fueron puestos en situaciones de riesgo en un contexto de alta inseguridad y violencia urbana para servir a los intereses políticos de las autoridades universitarias.
Calidad Docente en Entredicho
Finalmente, Urbina también abordó el tema de la calidad académica, argumentando que “es fácil saber la calidad de los maestros”, sugiriendo que existen fallas evidentes en la planta docente que la administración debería atender.
Las múltiples denuncias de Marcos Urbina, abarcando desde el presupuesto y la calidad de los servicios hasta la manipulación política, refuerzan el clima de desconfianza y la exigencia de transparencia y rendición de cuentas que atraviesa actualmente a la Universidad Autónoma de Sinaloa.
